DESCUBRIENDO FRUTAS

Lo he dicho aquí en varias ocasiones. En el mundo, hay 5.000 especies y 200.000 variedades de fruta. ¿No créeis que es una maravilla? Lo que daría por probarlas todas. Al menos, las especies. Al menos, la mitad de la mitad de las especies. En el grupo de Facebook de Frugívoros en España conseguimos hacer una lista de 113 frutas. Entre todos!!!! 113 frutas!!!! hasta las 5.000 variedades que existen en todo el mundo!!! Nos queda mucho por descubrir.
Gracias a mi amiga Olga he descubierto tres nuevas que me han sorprendido por su sabor y textura. Las tres se encuentran en España.
 En primer lugar os hablaré del kiwano, que es una especie de pepino, aunque más gelatinoso y con pepitas más grandes.

Su interior es verde y el exterior varia desde el verde hasta el amarillo pasando por el naranja. Tiene un sabor muy neutro, pero me gusta. 

Hay que tener en cuenta que el kiwano está considerado, al igual que el tomate, o el calabacín, el pepino o la calabaza.... como frutas no dulces.

 

Además de esta fruta no dulce, he probado otra, que es ácida: los kumquats.


Me resulta muy curioso en primer lugar porque se come todo entero, con piel. 
En segundo lugar, mientras que el corazón es muy ácido, la piel es muy dulce y el contraste es muy interesante.
Aunque reconozco que puedo comer muy pocos porque me resultan muy fuertes para el estómago.

He dejado para el final la fruta que más me gusta... será porque me gustan las frutas dulces. Vaya por delante que ya había probado una variedad de esta fruta en Vietnam. Allí lo llaman Dragon Fruit. Su piel es de color magenta y el interior tiene dos variedades, una en color fucsia y otro en blanco. La del interior fucsia tiene un poco más de sabor, pero la que tiene la carne blanca es bastante insulsa.

Cuando descubrí esta variedad en Barcelona, me sorprendió. Aquí se llama Pitahaya. Y es muy, muy dulce y tiene mucho sabor. Además, como véis, por fuera es de color amarillo.

De las tres frutas, me quedo con ésta.