miércoles, 11 de enero de 2012

TRIGO SARRACENO CON SABOR A MAR

Últimamente me han preguntado si no echo de menos algún plato cocinado, de los que tomaba cuando era omnívora y además comía cocinado.
Pues no, respondo yo. Pero no sé por qué últimamente pienso bastante en el arroz. Quizá porque me pedisteis que elaborara una receta con arroz crudo. 


El caso es que hoy me he acordado de un arroz negro que solía comer en Dénia (con pescado claro!)
Para emular aquel sabor, he decidido utilizar algas, y en vez de arroz, una semilla: el alforfón o trigo sarraceno.


El resultado ha sido sorprendentemente bueno.
He añadido unos ajos para dar el toque del alioli y esto ha sido definitivo. Tenéis que probarlo.


Aquí tenéis un nuevo plato, libre de crueldad animal, muy nutritivo y muy equilibrado.


Los que me seguís, sabéis que intento "crucinar" respetando las combinaciones de alimentos y sin excesivas grasas, porque además de crudo, quiero comer sano!







Ingredientes para 1 ración:


30 gr. trigo sarraceno (remojado al menos 1 hora)
5 gr. de algas (mezcla de arame, dulse y agar en tiras, también remojadas)
1 champiñón (macerado en aceite de oliva con dos ajos enteros, pero un poco aplastados)
aceite de oliva
2 ajos
sal
pimienta
perejil




La receta es muy sencilla de elaborar. Remojar todas las algas en agua. Al mismo tiempo, poner a remojo el trigo sarraceno. En otro bol, poner a macerar un champiñón, cortado a lonchas muy, muy finas, en aceite de oliva, sal y dos ajos aplastados, pero enteros. La idea es que dejar los ajos para que todo coja sabor, pero luego retirarlos para que no nos produzca malestar, especialmente a los que tenemos un estómago más delicado.


El trigo sarraceno necesita al menos 1 hora para reblandecerse y poderse comer crudo. Cuanto más tiempo, más blando. Recuerda enjuagar muy bien el alforfón con agua limpia una vez transcurrido el tiempo de remojo.


Emplatar mezclando el trigo sarraceno con el resto de ingredientes (menos los ajos). Yo he puesto una ramita de perejil. Si te gusta, trocéalo e incorpóralo a la receta. Puedes poner un poco de pimienta molida.


Disfruta!






No hay comentarios:

Publicar un comentario